Hoy viviremos uno de los días más intensos en cuanto a energía Lunar se refiere. El Sol, la tierra y la Luna se alinean para provocar la sombra que astronómicamente llamamos Eclipse, en éste caso de Luna.
Los Eclipses de Luna son por tradición astrológica un momento para dejar las cosas ir, para deslastrarse de aquello que ha obstaculizado el paso hacia tus objetivos o soltar aquello que pesa sobre tus espaldas.
Este evento por lo general causa en el colectivo una sensación de vacío y de melancolía, emociones que se asocian a la acción de perder algo. Es por ello que siempre hago la salvedad de que es un verdadero momento para apropiarse de las energías o verse victima ante ellas, la posición la decidirás tú, no con un acto de conciencia, sino con uno trascendente de vivencia.
Y por si fuera poco en la noche la Luna entrará fuera de curso, y nos mantendrá sumergidos en un limbo hasta la mañana del día 30. Así que la presencia y el mantenerse en zona de confort serán tarea de estos días.
En días como hoy llevar una alimentación controlada, nos ayudará a aliviar nuestro cuerpo y nuestras emociones, así que toma en cuenta las siguientes recomendaciones:
1. Al levantarte toma un vaso con agua lo más caliente que puedas.
Si bien tomar agua siempre es bueno, si se sabe cómo variar las temperaturas y los momentos del día en el cual consumirla seguramente se pueden obtener frutos realmente positivos. En esta ocasión puntual buscamos los beneficios de tomar agua caliente en ayunas.
En primer lugar, no podemos dejar de aclarar que beber este líquido vital con el estómago vacío inmediatamente después de salir de la cama se traduce como una forma muy efectiva de activar el metabolismo. Tomar agua a aproximadamente 38º evita un cambio brusco en la temperatura interna del organismo, sin dejar de mencionar que interviene en la digestión (permite disolver y procesar grasas), elimina toxinas, mejora el funcionamiento del aparato excretor, despeja las vías respiratorias y hasta posee un efecto relajante sobre el sistema nervioso.
2. Desayuna antes de las 8 am con un desayuno balanceado, incluye un carbohidrato y frutas, por ejemplo un plato de cereal con fresas, o avena con frutos secos.
3. El Eclipse de Luna ocurrirá a las 9:34 am EST (Si deseas saber la hora en tu país genera el calendario aquí); te recomiendo iniciar la Dieta de la Luna, toma en cuenta que debe comenzarse una hora antes de que cambie de fase la luna y durante las veintiséis horas seguidas y sin interrumpirse.
Durante las horas que dura el régimen no se debe comer ningún tipo de alimento sólido, pero si se puede tomar líquidos (agua mineral, café, té y mate sin azúcar) la cantidad que se desee. También puedes tomar otros líquidos como jugos de fruta frescos (sin pulpa y sin fibra), infusiones sin azúcar y caldos de verduras caseros o dietéticos. Por otro lado, deberás evitar la sal, el azúcar, caldo o cubitos concentrados, jugos con pulpa y azúcares añadidos y lácticos, ni siquiera los yogures dietéticos.
4. Escucha la frecuencia 852 Hz para volver al orden espiritual.
5. Toma mucha agua viva durante el día. Recordemos que el agua viva es aquella que es oxigenada de un vaso a otro, preferiblemente en vasos de cerámica para hacer el efecto de que es pasada por un tinajero.
6. Durante las tres comidas practica una respiración acompasada, inhala contando 4 tiempos, mantén el aire contando 4 y expulsa el aire contando 1…2…3…4.
Con estas seis recomendaciones, vivirás un eclipse de Luna en el que lo que se tenga que ir que se valla… Lo importante es estar en paz contigo mismo y mantener el equilibrio mental, físico y espiritual a través de los tres alimentos vitales, sólido, líquido y aire.
Es un buen momento para recordar mi frase:
“Apuesta a ti… El premio eres tú”
Imágenes: danabross.com; dietaliquida.com
