Una de las más grandes estrellas en la galaxia entera está subiendo en horas de máxima audiencia en tiempo. Betelgeuse, el hombro de color naranja brillante de Orión, el cazador, está en buena vista en el este por las 9 pm.
Betelgeuse, también llamada α Orionis o HIP 27989, es una brillante supergigante roja en la constelación de Orión. Es la novena estrella más brillante en el cielo, y es un objeto intrínsecamente grande y luminoso, por tratarse de una supergigante roja. El color característico de esta estrella proviene de las bajas temperaturas de su superficie (unos 3000 K). El estado evolutivo de la estrella es avanzado: ha pasado ya la etapa más importante de su vida, la secuencia principal, agotado ya el combustible en su núcleo que le proporcionaba energía (por fusión del hidrógeno), después de lo cual aumentó su tamaño hasta las enormes dimensiones actuales. Sus variaciones de luminosidad son propias de su presente como estrella gigante.
Betelgeuse es una estrella supergigante, razón por la cual su brillo es tan elevado a pesar de tener una temperatura superficial relativamente baja. A pesar de ser la estrella α de Orión, no es la más brillante de la constelación en luz visible, sino Rígel (β Orionis), pero en luz roja e infrarroja cercana, Betelgeuse sí es la más brillante.
Origen del Nombre: يد الجوزا, (transcrita como yad al-jawzā, o sea ‘la mano de Jauza’), siendo Jauza una figura mitológica de sexo femenino, inicialmente identificada por los antiguos árabes en el firmamento con Géminis y posteriormente asociada con la constelación de Orión. Durante la Edad Media, cuando el nombre de la estrella fue transcrito al latín, el carácter arábigo inicial, «Ya» (ي) de sonido «y», fue malinterpretado como una «Ba» (ب), de sonido «b», debido probablemente a que la escritura árabe permite que «Ya» altere su grafía en los inicios de palabra, y «Yad al-Jauza» se convirtió en «Bedalgeuze».
Más tarde, durante el Renacimiento, se especuló entre los eruditos occidentales que el nombre original habría sido «Bait al-Jauza», cuyo significado se pretendía que fuera «hombro de Jauza» en árabe, lo que condujo a la forma actual «Betelgeuse»; aun así, la forma correcta de «hombro» en árabe sería ابط («Ibţ»).
Nota: Esta información sólo es válida para el Hemisferio Norte.
¿Cuántas veces te detienes a observar lo que el cielo cada noche coloca en cartelera?… Recuerda el axioma que dice “Como es arriba… es abajo”… El cielo y las estrellas no son un adorno… son una realidad.
Observar nos conecta en un 30% con la energía del Universo. Imitar lo observado nos conecta en un 70% con la energía del Universo… Emular lo observado nos convierte en la energía.
Fuentes: radiouniverso.org, es.wikipedia.org
Imagen: enriquetabruni.blogspot.com, es.wikipedia.org