El espíritu de la Navidad es concebido no como una persona de carne y hueso, a pesar de que la leyenda así lo describe, sino más bien como una energía que viene desde del centro de nuestro sistema estelar y que llega año tras año para repartir, más que cosas materiales, aquello de lo cual los seres humanos no deberían prescindir: Paz, amor y con ellos sabiduría.
Lee con mucha atención nuestra Semilla del día.
Semáforo
Luz Roja: Al miedo.
Luz amarilla: A la ansiedad.
Luz verde: A la Presencia, a la paz, al amor.
“Apuesta a ti… El premio eres tú”
Lourdes Méndez