Neptuno en Piscis continúa potenciándose con la visita del Sol quien a su vez se funde con Quirón, dándonos la oportunidad de sanar nuestra realidad con la única condición de soltar aquello que ya no tiene permanencia en nuestra vida. Su cuadratura con Saturno lo sumerge en un auténtico periodo de limpieza que coincide con el ritual de la “cuaresma”1 . Excelente periodo para finalizar con hábitos limitantes y realizar acciones que mejoren nuestra calidad de vida. Somos como una planta con flores marchitas que debemos limpiar y podar para que pueda florecer.
Los seres humanos nos abriremos a nuevas experiencias espirituales, aceptando los “Universos paralelos”. Cabe la esperanza de que podamos ver la expresión más elevada de las vibraciones de este planeta. Toma en cuenta que todo final de ciclo es el momento de la siembra de otro nuevo.
“El 15 de Marzo la actual cuadratura Urano-Plutón que nos acompaña desde el 2011, se forma exacta por última vez a unos 14º de Aries-Capricornio respectivamente. Para esta lunación Venus se une a ecuación alineándose con Urano, pero el 9-10 y 11 Marte tomará su lugar y esta es una combinación mucho menos simpática que la anterior. Lo que no hayas soltado, se soltará. Lo viejo, a lo que todavía te aferres, se deslizará entre tus dedos, por más fuerte que aprietes. Lo que queda no tiene por qué ser malo o menos que lo anterior, simplemente diferente y nuevo, algo que tu alma debe estar pidiendo a gritos. Este es el momento cuando dejamos emerger un nuevo YO. Esto es para lo que te has estado preparando en estos últimos 4 años. Ha llegado el momento. Si tienes planetas en signos cardinales (Aries, Cáncer, Libra y Capricornio) sabes perfectamente de lo que estoy hablando. Tiempo para deshacerse de lo que ya no cumple ninguna función en nuestras vidas, y lanzarse a evolucionar, a conectar con un estado de consciencia más elevado, estés en el proceso que estés. El trígono de Júpiter a Urano, hará que esta transición se sienta como una liberación necesaria. Algo ha cumplido su función, y ahora debemos sentirnos agradecidos por las enseñanzas y abrir puertas a lo nuevo, sin miedo, con ímpetu y energía.”2