Tendzin Gyatso, XIV y actual Dalai Lama (1939 – hoy), también llamado «portador del loto», es el Jefe espiritual del budismo tibetano, considerado por sus seguidores la reencarnación del bodhisattva Avalokitesvara.
Al morir Thupten Gyatso, XIII Dalai Lama (1876-1933), los monjes lamas del Templo Amarillo iniciaron la buscada de su sucesor, y se encontró en el niño Tendzin Gyatso, XIV y actual Dalai Lama nacido en una familia de origen humilde del Tíbet en la provincia china de Quinghai. Tendzin Gyatso, declarado mayor de edad antes de tiempo por razones políticas, asumió el poder y se refugió cerca de la frontera con la India; al no recibir ayuda exterior pese a su llamamiento a la India de Nehru y a las Naciones Unidas, hubo de aceptar la tutela comunista, firmando en 1951 un tratado que convertía al Tíbet en una Provincia Autónoma China.
En constante conflicto contra el Régimen de Mao, el Dalai Lama lucha constantemente por preservar el sistema tradicional tibetano contra los chinos quienes por controlar el poder han designado por sí mismos a un joven chino como la reencarnación del Panchen Lama, otro alto dignatario budista.
La violencia en el Tibet y las luchas con china hicieron huir al Dalai Lama a la India, mientras Mao ponía en el gobierno del Tíbet al Panchen Lama). En 1982 Deng Xiaoping invitó a regresar al Dalai Lama, que prefirió permanecer en el exilio, dedicándose a preservar en el norte de la India, Nepal, Bután y Sikkim la cultura tibetana destruida por las autoridades chinas en su país de origen, al tiempo que asumía públicamente los ideales de la democracia y el pacifismo.
El Dalai Lama viaja por el mundo pidiendo por la soberanía de su nación, de manera pacífica y promoviendo soluciones basadas en la tolerancia y el respeto mutuo, para preservar la herencia histórica y cultural de su pueblo. Premio Nobel de la Paz en 1989, en 1990 publicó su autobiografía “Freedom in Exile”.
