Hoy es un día de celebración para muchos, celebración que crea en el colectivo algo que conocemos como “Masa crítica”, sin embargo la configuración planetaria recomienda ampliamente quietud emocional y accional.
¿Cómo lograrlo?
Convirtiéndonos en observadores de nosotros mismos y de nuestra historia, tanto desde el ángulo familiar como desde el ángulo existencial.
Hoy 4 de Julio es el día de la Independencia en Estados Unidos y hay pocas cosas como la independencia en las américas para demostrar la importancia de los ciclos astrológicos. Durante el mes de Julio las fuerzas de Leo y Cáncer han impulsado en la lucha independentista a las naciones de Venezuela, Colombia, Argentina, Perú y Estados Unidos.
Además es el mes del natalicio de Simón Bolívar y el año nuevo maya: Momento de liberación y nuevos comienzos.
Así que mientras todos están en una celebración rutinaria, festejando lo mismo y de la misma manera que lo han hecho por siglos, te hacemos la pregunta: ¿De verdad eres independiente? ¿De pensamiento y emoción?, ¿De sentimiento y corazón?, ¿De acción y decisión?
La independencia es mucho más que poder tener una bandera y escoger tus gobernantes, ese es un importante primer paso pero no es el camino completo.
Aquello por lo cual lucharon nuestros ancestros era la búsqueda de independencia en todos los sentidos de la palabra y esa sólo puede ser alcanzada a través de la toma consciente de decisiones y la vida libre de presión y manipulación social.
Así que hoy, en medio de las celebraciones, piensa sobre tu vida y las decisiones que has tomado, y responde con sinceridad: ¿Eres libre?
- Toma decisiones con verdadera independencia.
- Busca quiénes son tus tiranos.
Recuerda que la mayoría de las dificultades y las tensiones que sufrimos tienen su origen en la mente.
Por medio de la concentración en la respiración logramos calmar el flujo incesante de las distracciones, como resultado nuestra mente se vuelve lúcida y clara. Entonces, intentamos permanecer en ese estado de calma mental durante un tiempo. Esta práctica es una prueba de que podemos experimentar paz interior y satisfacción con sólo controlar la mente, sin tener que depender de las condiciones externas. Cuando la turbulencia de las distracciones disminuye y nuestra mente se calma, surge de forma natural un sentimiento profundo de plenitud.
