El planeta Mercurio apenas se asoma a la vista en el este un poco antes de la salida del Sol durante los próximos días. Pero está bastante bajo en el cielo, así que es difícil encontrarlo.
Mercurio
El pequeño planeta Mercurio se asoma al cielo del amanecer los próximos días. Está en el este-sureste unos 45 minutos antes de la salida de sol, y parece una estrella brillante. Sin embargo, está tan bajo en el cielo que es difícil de distinguir, cualquier obstáculo en el horizonte bloqueará su vista.
La salida de sol en Mercurio puede resultar algo extraño. En determinados momentos en la órbita de Mercurio, el Sol puede subir por el cielo, detenerse, cambiar de dirección y volver a descender por debajo del horizonte. Y a la puesta de sol sucede lo contrario: el Sol se pone, reaparece, y después vuelve a ponerse.
Esto se debe, entre otras razones a que la órbita de Mercurio alrededor del Sol está muy estirada. Cuando el planeta se encuentra más alejado del Sol, está una vez y media más lejos que cuando se encuentra en su punto más cercano.
Hay más fenómenos que crean otros efectos interesantes. El Sol se ve mucho más grande, por ejemplo, cuando Mercurio se encuentra más cerca, y es el doble de brillante. Mercurio no sólo recibe más luz visible, sino también más rayos X y ultravioletas. Los ingenieros deberán tener esto en cuenta cuando diseñen vehículos espaciales para estudiar a Mercurio, ya que el vehículo necesitará protección extra contra el calor y la radiación del cercano Sol.
¿Cuántas veces te detienes a observar lo que el cielo cada noche coloca en cartelera?… Recuerda el axioma que dice “Como es arriba…es abajo”… El cielo y las estrellas no son un adorno… son una realidad.
Observar nos conecta en un 30% con la energía del Universo.
Imitar lo observado nos conecta en un 70% con la energía del Universo…
Emular lo observado nos convierte en la energía.
