Casiopea
De acuerdo a una leyenda Griega, el dios del mar Poseidón colocó a la figura de Casiopea entre las estrellas. Se dice que Casiopea tiene una posición ridícula y al revés para castigarla por haber sido tan pretenciosa. Casiopea estaba muy orgullosa de su belleza. Ella decía que ella y su hija Andrómeda eran más bellas que las ninfas del mar, las Nereidas.
Las ninfas se quejaron al dios del mar Poseidón, quién amenazó de enviar un monstruo marino y una inundación para destruir la tierra de Casiopea. Desesperado, el rey Cefeo consultó un oráculo para prevenir la destrucción de su reino. El oráculo le contestó que solamente sacrificando a su hija Andrómeda al monstruo podía apaciguar la ira de Poseidón.
El rey encadenó a Andrómeda en un acantilado en el mar. Afortunadamente, en ese mismo momento, Perseo, el sobrino del rey de Argos, estaba viajando a lo largo de la costa. Perseo notó a la hermosa mujer y se enamoró de ella. Al saber la historia de Andrómeda, él se ofreció a rescatarla si sus padres aceptaban que se casara con ella. Con la ayuda de sandalias mágicas que le permitieron volar, y una espada mágica que le dio el dios Hermes, Perseo mató al monstruo marino y se casó con Andrómeda.
Nota: Esta información sólo es válida para el Hemisferio Norte.
¿Cuántas veces te detienes a observar lo que el cielo cada noche coloca en cartelera?… Recuerda el axioma que dice “Como es arriba… es abajo”… El cielo y las estrellas no son un adorno… son una realidad.
Observar nos conecta en un 30% con la energía del Universo.
Imitar lo observado nos conecta en un 70% con la energía del Universo…
Emular lo observado nos convierte en la energía.
Fuentes: radiouniverso.org, actualidad.rt.com, astroyciencia.com
Imagen: bitacoradegalileo.com