Lacerta, la iguana, corre alta por encima de la cabeza en las noches de septiembre. Está entre las alas extendidas de Cygnus, el cisne, y Casiopea, la cual tiene forma de una W. Usted necesitará cielos oscuros y un mapa estelar para ayudarle a encontrar este garabato de cinco estrellas.
Lacerta (genitivo Lacertae), el lagarto, es una de las 88 constelaciones reconocidas por la Unión Astronómica Internacional. Está situada a unos 20 grados al este de Deneb (α Cygni). El cuerpo del lagarto va en dirección norte-sur. Fue recogida en el atlas de Hevelius en 1690.
Al sur de Cefeo, entre Andrómeda y el Cisne, se encuentran las estrellas de cuarta y quinta magnitud que forman el Lagarto. Fue el astrónomo polaco Johannes Hevelius quien la creó en 1.687. Como nombre alternativo, Hevelius ofreció el de Stello, un tritón con marcas que recuerdan estrellas encontrado en el Mediterráneo. Otros nombres que no han perdurado son Sceptrum (el cetro) y La Mano de la Justicia, apuntillado por el astrónomo Augustine Royer en 1.679, en honor al rey francés Luis XIV.
Normalmente se representa al lagarto orientado hacia el norte. Las estrellas α (3.77; azul-blanca) y β indican la posición de su cabeza. Esta figura se desvanece a partir de latitudes medias del sur. Tiene su punto más álgido alrededor del 28 de agosto.
Mitología e historia
Cuando Perséfone, hija de Deméter, fue raptada por Hades, la diosa la buscó insistentemente por el cielo y la tierra. Durante diez días vagó, sin comer ni beber, sin obtener noticia alguna.
Disfrazada llegó a Eleusis, donde el rey Céleo y su esposa Metanira la recibieron hospitalariamente y la invitaron a quedarse como nodriza de de su hijo Demofonte.
Entre Yambe, hija de Céleo, y Baubo, nodriza seca, tendieron una broma a Deméter induciéndola a beber agua de cebada para calmar su sed. Abante, hijo también de Céleo, se mofó de la diosa y esta con una mirada torva lo metamorfoseó en lagarto.
El rey Céleo, se disgustó muchísimo y Deméter para aplacar su dolor propuso hacer inmortal a Demofonte. Durante la ceremonia se rompió el hechizo y Demofonte murió. Consumada la tragedia los dioses colocaron a Abante como el lagarto entre las estrellas.
Nota: Esta información sólo es válida para el Hemisferio Norte.
¿Cuántas veces te detienes a observar lo que el cielo cada noche coloca en cartelera?… Recuerda el axioma que dice “Como es arriba… es abajo”… El cielo y las estrellas no son un adorno… son una realidad.
Observar nos conecta en un 30% con la energía del Universo. Imitar lo observado nos conecta en un 70% con la energía del Universo… Emular lo observado nos convierte en la energía.
Fuentes: radiouniverso.org, astrodiario.blogspot.com
Imagen: astrodiario.blogspot.com