La Luna está en su primer cuarto esta noche, indicando que está en su segundo su ciclo mensual de fases. La Luz solar ilumina la mitad del disco lunar que da cara a la Tierra, así que se ve como si alguien hubiera rebanado a la Luna por la mitad.
La Luna ha sido Inspiración de poemas, mitos y leyendas, la luna ejerce una influencia potente en la vida de los seres humanos.
Algunos de sus efectos son conocidos, como el que tiene sobre las mareas, pero existen otros menos comentados, como su ascendente sobre la calidad, profundidad y duración del sueño, o su relación con el ciclo menstrual de las mujeres, la reproducción humana, y la agricultura.
Un estudio de la Universidad de Basilea, en Suiza, publicado hace unas semanas, mostró por primera vez con datos objetivos, que este cuerpo celeste afecta al sueño de las personas. Las pruebas, que se realizaron a 33 voluntarios bajo condiciones de laboratorio controladas, revelaron que durante la fase de luna llena bajan los niveles de melatonina, hormona relacionada con la regulación de los ciclos de sueño y vigilia, y eso coincide con la menor duración del sueño.
También se verificó que la actividad cerebral relacionada con el sueño profundo de los voluntarios se redujo en 30% y, al despertar, todos sentían que habían tenido un sueño poco reparador.
Su efecto sobre otros sistemas del ser humano genera más controversia. Existen estudios que sugieren una relación con la frecuencia de las crisis epilépticas, y otros que hablan de un ascendente sobre el ciclo menstrual, la fertilidad y los partos.
Un grupo de enfermeras obstetras del Hospital de Albacete, en España, hizo una investigación para comprobar si existía una relación entre las fases de la luna y el adelantamiento de los partos. Determinaron que en las cuatro etapas lunares nace una cantidad similar de niños y que la presión atmosférica no influye en la rotura del saco amniótico.
Siembra y cosecha
Hay un tipo de agricultura que le presta especial atención a la luna. Se trata de la biodinámica, una corriente alternativa que reconoce las prácticas agrícolas de las culturas ancestrales y que ve la siembra y cosecha de la tierra como una forma de vida.
El ingeniero agrónomo Claudio Cárdenas explica que quienes han estudiado esta disciplina han visto que, así como la luna influye en los líquidos, también lo hace en los vegetales, específicamente en la savia, que transporta los nutrientes y elementos necesarios para que la planta se desarrolle.
“Cuando hay luna nueva, la savia se concentra en las raíces de la planta. En cuarto creciente, comienza a subir por el tallo, y en luna llena se concentra en las hojas y follajes del vegetal. En menguante, comienza a descender”, detalla. Por eso, no convendría cortar hojas o follaje en plenilunio, porque se priva a la planta de sus nutrientes.
Esto explica por qué algunas civilizaciones no cosechan hierbas medicinales en luna llena y sí lo hacen en menguante.
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¿Cuántas veces te detienes a observar lo que el cielo cada noche coloca en cartelera?… Recuerda el axioma que dice “Como es arriba… es abajo”… El cielo y las estrellas no son un adorno… son una realidad.
Observar nos conecta en un 30% con la energía del Universo. Imitar lo observado nos conecta en un 70% con la energía del Universo… Emular lo observado nos convierte en la energía.
Fuentes: radiouniverso.org, observatorio.info
Imagen: elsofista.blogspot.com
