Origen del nombre
En medio de las nieves frías y profundas del pleno invierno, las manadas de lobos gritan hambrientas afuera de las aldeas nativas. Así fue cómo se le dio el nombre para la Luna Llena de enero. A veces también era nombrada como la Luna Vieja o, la Luna después de Yul (Navidad). También era conocida como la Vieja Luna o la Luna después de Yule (Navidad). Para algunas tribus ésta era la Luna Llena de la Nieve; que como ya se observa, era un nombre aplicado a menudo a la luna de Febrero.
Todos estos nombres de la Luna Llena se remontan desde la época de los indios norteamericanos, hasta nuestros días, en los Estados Unidos, sobre todo en el norte y este estadounidense. Las tribus indígenas acostumbraban a seguir el curso de las estaciones dándole nombres distintivos a cada una de las Lunas Llenas que se repetían a lo largo de los meses del año. Sus nombres eran aplicados al mes entero en el cual ocurría cada una de ellas…
Había algunas variantes en cuanto a los nombres de las lunas entre unas tribus y otras, pero en general, eran los mismos nombres comunes que usaban las tribus de Nueva Inglaterra hasta las que estaban establecidas muy cerca del lago Superior. Los colonos europeos siguieron utilizando aquella misma costumbre, e incluso, ellos crearon algunos nombres propios para designar a éstas Lunas Llenas. El mes lunar es sólo 29 días de duración en promedio, la fecha de la Luna Llena se suele “correr” o cambiar de un año a otro, es decir, no cae en la misma fecha cuando de nuevo se repite el mes al año siguiente.
Mitología
El Sol, ya sea que aún no nazca hasta Imbolc, o que ya haya nacido en Yule está creciendo en fuerza y poder. Ha derrotado a las fuerzas de oscuridad que residen en el Inframundo al cual entró en Mabon.
La Diosa por su parte, se encuentra descansando del parto o preparándose para él y volverá a ser Doncella.
Hoy una anillo gigante de estrellas adorna nuestro cielo
El Hexágono invernal es una figura Astronómica (o seudoconstelación) con forma de hexágono imaginario, visible durante el invierno en el hemisferio norte. En ocasiones, es denominado como círculo de invierno.
Sus vértices se corresponderían con Rigel, Aldebarán, Capella, Pólux/Cástor, Procyon y Sirio (Cástor y Pólux están muy cerca una de la otra (sólo unos grados)).
En la mayor parte de la Tierra (excepto la Isla Sur de Nueva Zelanda y el extremo sur de Chile y Argentina y la Antártida) esta figura es perfectamente visible en el cielo desde diciembre hasta marzo. En los trópicos y el hemisferio sur (en éste último llamada «hexágono de verano») puede ser considerada como formada por la brillante estrella Canopus, más al sur, en lugar de Sirio.
El Triángulo invernal, más pequeño pero más definido (de acuerdo a su nombre) y por lo tanto más fácil de localizar, es aproximadamente equilátero y comparte dos vértices con el hexágono (Sirio y Procyon). El tercer vértice es Betelgeuse. Estas tres estrellas están entre las diez estrellas más brillantes vistas desde la Tierra, siendo Sirio la más brillante. Betelgeuse es también fácil de localizar, pues es el hombro de Orión, una vez localizado el triángulo el hexágono es más fácil de divisar.
Las estrellas del hexágono forman parte de seis constelaciones. En el sentido del reloj alrededor del hexágono, comenzando con Sirio, veremos a Canis Major, Canis Minor, Géminis, Auriga, Tauro y Orión. Así, un observador que localice Orión puede ubicar el triángulo y el hexágono para ubicar así las otras cinco constelaciones.
Nota: Esta información sólo es válida para el Hemisferio Norte.
¿Cuántas veces te detienes a observar lo que el cielo cada noche coloca en cartelera?… Recuerda el axioma que dice “Como es arriba… es abajo”… El cielo y las estrellas no son un adorno… son una realidad.
Observar nos conecta en un 30% con la energía del Universo.
Imitar lo observado nos conecta en un 70% con la energía del Universo…
Emular lo observado nos convierte en la energía.
Fuentes: radiouniverso.org, es.wikipedia.org
Imagen: es.wikipedia.org