“Un acercamiento al ¿Cómo? y el ¿Con qué? pasar de un sueño a la acción en tiempos de crisis”.
Un joven deja sus estudios por un sueño “Las artes escénicas”. Recorre Europa como músico y por necesidad aprende el oficio de “Traga Fuego”. La realidad lo sacude y debe buscar un trabajo en una central hidroeléctrica. Al tercer día pierde el trabajo por una huelga.
De vuelta en la quiebra, se reencuentra con sus amigos de similares profesiones y en igual estado económico, decidió no buscar otro empleo y con ayuda de su seguro de desempleo se abocó a organizar una feria con sus amigos quienes buscaban hacerse cargo de un albergue para jóvenes actores.
Un sueño, tres jóvenes y actores de un albergue. Es así como Guy Laliberté, Daniel Gauthier y GillesSte-Croix formaron el famoso “Circo del Sol” (Lea más en Wikipedia).
Revisemos algunos elementos en la situación. Hay algunas realidades latentes y palpables en esta historia por ejemplo: “Si requieres personal para una empresa en época de crisis lo puedes conseguir más fácilmente y de muy buena calidad entre tus amigos desempleados ya que en los tiempos de crisis las grandes empresas suelen despedir constantemente personal”.
Primero, en esta situación es importantísimo que ejerzas el liderazgo de manera convincente pues debes poder seducir a las personas golpeadas con las crisis y decepcionadas de no poder alcanzar sus metas de que el camino que ofreces es la solución a los problemas.
Pero esto implica un esfuerzo muy importante tú debes ser “el líder”, dejar tu posición personal de duda y recordarlo al tomar las decisiones. Escucha el consejo de los que te rodean y de los que saben, pero asume que eres el responsable de las decisiones. Siempre existirán personas que te digan que lo hiciste bien y/o que lo hiciste mal, pero lo importante es que solo quien toma decisiones, impulsa a la acción y asume las consecuencias (en ocasiones esto es lo que más cuesta) es considerado el verdadero líder.
En todo caso, si asumes un curso de acción basado en decisiones racionalmente tomadas, tendrás la garantía de dar una buena lucha, y los que permanecen y perseveran son los que obtienen la recompensa y/o la experiencia.
En segundo lugar, la inversión. En este punto lo más importante es invertir en la gente, ya dijimos que estamos en crisis. Entonces, las personas están desilusionadas, cansadas, quebradas, desanimadas, preocupadas y en muchos casos estresadas.
Si todos presentan estos síntomas y tú los obligas a venir en traje de marca; o si fuerzas hasta el máximo los controles de entrada salida y permanencia; o si te ven llegar con un reloj suizo de oro no te será tan fácil conseguir de ellos lo que se requiere.
Los pocos recursos que se tienen deben dedicarse a mejorar el ambiente de trabajo en la oficina, uniformes que tu proporciones; evaluación enfocada en actividades, metas y objetivos; así como pequeños esfuerzos basados en satisfacer la escases de esparcimiento que tenemos durante las crisis son soluciones creativas enmarcadas en el ABC del cultivo del recurso humano, especialmente si realizan un trabajo creativo no repetitivo.
Toma en cuenta que cualquier medio de ingreso adicional que encuentres para el grupo es una fuente de satisfacción o solución temporal del que generalmente es el problema más grave de un desempleado -la falta de recursos-. Esto resulta una buena inversión.
Recuerda, cada vez que intentes alcanzar un sueño sobrevienen triunfos y fracasos, pequeños y grandes. Apuntálate en ellos, en ambos, los fracasos te enseñaran y los triunfos te fortalecerán. Con cada acción ten el sueño en la mente. Celebra y comparte con los que te acompañan. Y recuerda cuidar el recurso que te ayuda a conseguir el sueño que persigues, tus amigos.
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