“Energía viva que puedes plantar en tu vida”
En un día como hoy… Nace Johannes Kepler, físico, astrónomo y matemático alemán, figura clave en la revolución científica; fundamentalmente conocido por sus leyes sobre el movimiento de los planetas sobre su órbita alrededor del sol.
Sus tres leyes sirvieron a Newton para desarrollar su teoría gravitatoria, aunque el mismo Kepler conocía o intuía el fenómeno de la gravitación. Lo curioso es que el mayor interés de Kepler no era llegar a esas brillantes conclusiones a las que concedió escasa importancia, sino que andaba tras la búsqueda mística de la armonía de las esferas, la sinfonía matemática con la que Dios hizo el mundo.
Su obra se enmarcaba dentro de una concepción astrológica de la vida. Creía en ella como una ciencia experimental exacta, pero rechazaba las profecías populares que él mismo nunca dejó de lanzar. Sus horóscopos tenían un gran éxito gracias a sus aciertos como la invasión turca, una gran ola de frío o las precisiones sobre la vida de un famoso general austríaco.
El momento culminante de su obra lo alcanzó con el noble Tycho Brahe, astrónomo imperial, astrólogo popular, alquimista reconocido y eficaz constructor de autómatas, quien proporcionó a Kepler el bagaje matemático y sistemático para establecer sus famosos principios.
Publica almanaques con predicciones astrológicas En la época, la distinción entre ciencia y creencia no estaba establecida todavía claramente y el movimiento de los astros, todavía bastante desconocido, estaba gobernado por leyes divinas.